Lesiones deportivas en piernas en el fútbol

En el futbol, las piernas nos permiten alcanzar grandes velocidades, además, podemos correr, dar saltos o cambiar de dirección rápidamente. Sin embargo, nuestra las piernas están predispuestas a sufrir distintas lesiones debido a la propia dinámica del fútbol.

También son una de las partes en la cual los futbolistas sufren más lesiones. Esto debido a que músculos como los isquiotibiales o los cuádriceps están en constante uso y son propensos a golpes, traumatismos y lesiones de todo tipo.

¿Cuáles son los tipos de lesiones en piernas más comunes cuando jugamos al fútbol?

Las lesiones en las piernas suelen ser musculares, en especial en los isquiotibiales y cuádriceps ya que estos son los músculos encargados de aportar potencia a las carreras en corto y largo que se realizan constantemente durante un partido.

A continuación te comentamos algunas de las lesiones más comunes en las piernas:

Lesión en el cuádriceps

El desgarro muscular de cuádriceps es una de las lesiones que afectan, no solo a los futbolistas, sino también a la mayoría de personas que practican deportes de contacto. Estos se encuentran ubicados en la parte delantera de la pierna y su contracción nos va a permitir caminar o correr, por lo que un golpe en ese lugar puede traer consecuencias. En el caso de los futbolistas, están mucho más expuestos a este tipo de lesiones.

Cuando hay un desgarro de cuádriceps es debido a que las contusiones recibidas en esa zona hacen que los músculos choquen contra el hueso, generando así una rotura de las fibras de los mismos. Esta lesión suele ser muy dolorosa. Sin embargo, no se puede saber que tan grave es hasta que no sea evaluada. Por lo tanto, si estas jugando y recibes un golpe en ellos y te genera mucho dolor, lo recomendable es parar la actividad y acudir a un médico para realizar las pruebas que determinen si hay daño o no.

Lesión del Bíceps femoral

Esta lesión es también llamada la lesión del futbolista velocista, ya que son los más veloces los que llegan a llevar e estos músculos al límite. El bíceps femoral se activa cuando el pie apoya contra el suelo haciendo que se tense y generando en él una gran fuerza.

La rotura del bíceps femoral genera un dolor agudo en la parte posterior del muslo hacia la lateral, y su dolor hace imposible el seguir cualquier actividad que incluya caminar, debido a que es muy doloroso intentar siquiera doblar la rodilla. El tiempo de recuperación varía de acuerdo a la gravedad de la lesión que puede llegar hasta los 4 meses de inactividad.

Distención en los isquiotibiales

¿Has visto cuando un futbolista va en carrera y se toca la parte posterior de la pierna? Este es el famoso “pinchazo”, una lesión muy común después de carreras cortas explosivas o carreras largas y con cansancio acumulado en las piernas. Cuando se rompe alguna fibra de estos músculos, el dolor suele ser fuerte, y si no se toman las medidas necesarias, puede empeorar hasta convertirse en un desgarro total.

Esta lesión representa el 12% de las lesiones que sufren los futbolistas y aparece con mayor frecuencia en aquellos que sobrepasan los 30 años. Para evitarla solo debemos estirar bien los músculos antes de entrenar y fortalecerlos haciendo diferentes ejercicios para esa zona en específico. También es importante una buena alimentación e hidratación.

Lesión en los muslos

Las fibras de los músculos están expuestas a sufrir distenciones, desgarros o contracturas, debido a diferentes causas como exigencia al máximo de nuestros músculos, mal apoyo cuando caemos o diversos golpes en la zona por entradas muy bruscas de los rivales para intentar robarnos el balón.

Se pueden prevenir estas lesiones realizando el calentamiento previo antes de jugar o entrenar, ya que muchas veces iniciamos alguna de estas actividades sin tener una preparación adecuada, haciendo que nuestros músculos sean más sensibles a sufrir dichas lesiones.

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¿Cómo aplicar el método RICE para tratar las lesiones de piernas en jugadores de fútbol?

El método PRICE (llamado anteriormente RICE) es una forma práctica que te permitirá disminuir la inflamación de la lesión para ayudarte en el proceso de recuperación.

A continuación te enseñamos paso a paso cómo aplicarlo detenidamente:

• Protección: lo primero es realizar un vendaje a la pierna si se trata de una rotura muscular o incluso entablillarla si lo que nos ha pasado es una fractura en el fémur. Con esto lo que se busca es evitar que la lesión se agrave por intentar moverla o recibir un segundo golpe en ella.
• Reposo: hasta que un médico nos revise debemos guardar reposo total y no mover ni usar más la pierna afectada, en especial si creemos haber sufrida una fractura muscular u ósea.
• Hielo: con el hielo podremos reducir la inflamación gracias a su efecto de vasoconstricción, el cual también minimizará el dolor generado por el desgarro, calambre, rotura muscular o fractura de fémur.
• Compresión: la compresión puede aplicarse tanto con un vendaje, como con una prenda de compresión que en este caso podría ser una rodillera, tobillera o pantaloncillo de compresión que mantenga la inflamación a raya.
• Elevación: por último debemos elevar la pierna lesionada por encima del nivel del corazón, de modo que se reduzca el flujo de sangre a la lesión y la inflamación no avance.

Referencias

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